2020 ha sido un año terrible para muchas personas. Tanto trauma, dislocación, enfermedad, tragedia y muerte. Todos tienen sus propias historias y todos sufrieron (de manera desigual e injusta) los cambios extraordinarios acontecidos en nuestras vidas. Y, sin embargo, se plantaron semillas. Dentro de cinco o diez o quizá, el resto de nuestras vidas, la gente recordará y celebrará proyectos que se iniciaron, conexiones que se establecieron, realizaciones que ocurrieron. Se abrieron puertas, nacieron bebés y se hicieron cambios. Pocas personas celebran los incendios forestales, pero todos estamos dispuestos a caminar por los claros que siguen, en medio del bosque naciente. Si no plantaste todas las semillas que esperabas plantar en 2020, está bien. Porque el mejor momento para plantar más semillas es ahora mismo. O quizás mañana. A todos ustedes que me leen, hoy les deseo mucha alegría, les deseo paz y estar rodeados de sonrisas. Les deseo ánimo y esperanza de un mejor porvenir. ¡Feliz N