back in time...

Algo maravilloso que tiene mi mente es una aplicación instalada que uso a menudo (WTimeBack App). Hoy le hice 'click'...

Llegamos al café... Hay una 'O' enorme en la entrada que me hace pensar cosas... Estabas bellísima para mi, visualmente 'hot' para una tarde-noche que no pinta claro en que terminaría. Estabas como siempre, cercanamente alejada...

Encontramos algo que llaman mesa y apretados comenzamos a mirar alrededor. Gente, personas, seres vivos, risas, humo, tabaco, pre fiesta. Tu y yo. Amigos. No más. La confusión de mi ser en su estado manifiesto de seguridad aparente... sólo aparente. Ni yo sabía que querría al mirar tus ojos brillantes, tu boca roja y el abrigo rojo.

Mi mirada sondeaba alrededor. Me hablabas de ellas, amigas dispuestas a conocer. Me contabas sus historias. Eran breves, llenas de lagunas, de miles de preguntas. Hablabas como tu. Amiga de lagunas, amiga de inquietudes, amiga de intriga envuelta en confianza del que sabe mucho y no sabe nada... Miraba tus piernas.

Te contaba de algunos, te contaba de mi constante limitación de amistades masculinas que valen respeto. A la baja, cada día hay menos. No me atrevía a presentarte a monstruos forrados de peluche. No me atrevía a acercarte a lobos que pasan por ovejas. No quería hacerme pendejo, suicidarme sentimentalmente cuando en el fondo... en el fondo flotante de lo obvio... solo te quería a mi lado. Te quería para mi.

Pero mi obsesiva confusión que en aquel momento mantenía groseramente presente; me hacía ser extraño, raro, demente, perdido.

Mirada profunda, mirada que busca... Miraba tu sonrísa, que desde la primera vez, visualmente me hizo adicto. Miraba tu cuerpo forrado en tela roja, el fondo negro y la blancura de más adentro... Deseo congelado recuerdo. El frío era fuerte, el abrazo inminente, la pinche confusión majestuosa, la distancia constante.

Mi arquitecto proyectaba. Un templo de deseo prohibido. Puertas que no van a ningún lado, accesos que no lo son, columnas que no sostienen. Vanos y macizos que por fuera estaban en sentido inverso. Muchos años antes me encargaron proyectar una pasión. Secretamente me inspiré en mis deseos no manifiestos y proyecté "Irene, ciudad prohibida" con un solo volumen, una torre que llevaba a la altura sin sentido. Llena de grietas y una enredadera eterna que en mis trazos dejaba sensación de viejo. Planta desordenada, sinsentidos en espacios abiertos y cerrados. Una escalera que llegaba y no llegaba... Un caos que merecidamente en mis palabras de presentación, mereció una mención. Frase en respuesta, que culmino en un diez:

- Para que sirve tu proyecto?

- Para caminarlo y pensar... para nada más.

Nos fuímos esa noche de café O. Cada uno a su morada, cada uno a su espacio, a su tiempo... no sabía que al tiempo, estaría profundamente enamorado de la mujer de negro y rojo. Había que caminar y pensar, nada más.

Comentarios

  1. ains carlitos me encanto tu post!! me hiciste leerlo sin apenas parpadear e incluso mi cabeza ya cambiaba elguion y continuaba la historia jajaja un besote grandes de tu amiga loca mallorkina

    ResponderBorrar

Publicar un comentario

Entradas más populares de este blog

el por que NO al Facebook...

¿Recuerdas?

Agosto...