
llueve... Siento las gotas caer en mi cara. Siento como corren por mi piel, me hacen cosquillas, se meten en mis poros, me gusta; lo odio... no sé. Amo volar, amo sentir como la nave de acero acelera y veo entre ojos como muchos se persignan. Breve adiós que todos en conjunto, en silencio manifiestan al ponerse en manos de deidades omnipresentes. Cierro mis ojos, me elevo, me gusta sentir que vuelo... no digo adiós. No quiero decir adiós aún, no estoy listo, no que no que no!!! Llueve afuera, escribo adentro. Estoy confuso. La claridad de mis objetivos en mis juegos "proyectos" me llena el día pero estoy confuso. Ando como sushi agridulce... saben necesito decir y gritar "te quieros" como merolico... Ja... ni se que escribo, solo escribo, escucho a Tscahikovsky, lo mezclo con Mozart y le metemos un poco de jazz; cocktail de sentidos y sentires. Me lees? acaso me estás leyendo? como saberlo, musa inspiradora condenada que me alejo para alejarte y solo anda...