cansado...

Efectivamente y fisicamente estoy cansado... vuelvo de un viaje corto, pero no por corto deja de ser agotador. Ayer por la noche hubo fiesta, Manuelito cumplió años y como en viejos tiempos, la fiesta se armó... hacía tiempo que no teníamos fiesta así.

Nuevamente la globalización se hizo presente, yo de entrada acompañado de mi delicioso hurto a las tierras sudamericanas de la argentina... donde mi mente también reposa seguido, muy seguido. Como extraño ese aroma a asado, a puerto, a ches, extraño...

Muchos invitados que no se dejaban ver desde hace tiempo, ya la tradicional fiesta de Manuel, se convierte en mojonera temporal de "nos vimos hace un año". El co-anfitrión Juanito apresurado por las travesuras del niño Manuel que hizo su mejor esfuerzo para animarnos a destrozar el inmueble. Los típicos sprays de espuma, trompetas que hacen ruidos infernales y toda una orgía de ipods conectandose y desconectandose, orgía high tech...

Llegó Willy, como siempre partiendo plaza, como siempre el ojiverde sabiendose bien recibido, que gusto verlo tan feliz, tan acompañado ahora por sus preciosas hijas, felicidades amigo, lo mereces...

Sorpresa de ver a algunos que desde lejos nos acompañaron, Brasil, Colombia, Francia, etcétera. Por más que hicimos el esfuerzo, no pudimos armar la samba como es debido, pero las 4 fueron bien recibidas, faltaron caiphirinas...

Total dieron las 3 y a dormir se dijo; la pampa y el valle mexica se retiraron, llenos de harina, de espuma y con dos estocadas puestas, se hizo la noche...

Besos.

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